Tenía muchísimas ganas de verla, porque he pasado por situaciones parecidas muy cercanas también.
Mi padre tuvo cáncer y también por desgracia, no lo superó y digamos que yo, su muerte, tampoco la he superado.
Como el chico de la película, yo tampoco quería que se marchase, aunque deseaba que se acabase todo, que se curase y estaba convencida de ello, aunque sabía que tarde o temprano, pasaría.
Tenía miedos, no me imaginaba una vida sin él, no quería soltarle en el camino, quería estar con él a muerte.
Sin embargo el día negro llegó y con él su partida y un gran vacío. Por desgracia yo no tuve la suerte de despedirme de él o de darle un último abrazo, así que siempre escribo, para dedicarle unas palabras, aunque nunca termino despidiéndome o cerrando ese vacío.
Termino esto diciendo que todo en esta vida pasa por algo, que nunca estás solo y que aunque te creas invisible vas a estar siempre acompañado, ya sea por tu familia o por ese "mounstro que va a verte". Y valora los momentos porque nunca sabes cuando se van a ir y por desgracia no vas a poder volver atrás.
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